El campo de golf de las Islas Borromeas es un campo construido en un entorno natural y puro, situado a 500 metros sobre el nivel del mar, con una exposición sur, fresca en verano y soleada en invierno. Pero, sobre todo, le encantará la flora natural. Los abedules plateados siguen a los jugadores a lo largo del recorrido; también encontrará pinos, abetos y alerces, así como robles, encinas y castaños, con el particular cedro de Mikado a lo largo del hoyo 12. Los rododendros y las azaleas en primavera, la retama en verano y el brezo en otoño completan el típico paisaje prealpino, del que algunas zonas están protegidas.
El campo de Par 72 ha sido diseñado para adaptarse al entorno natural en el que se encuentra. Los obstáculos de cada hoyo no están construidos, sino que han estado ahí durante siglos y se utilizan para crear un campo divertido pero desafiante. Cada hoyo tiene su propia belleza. El más corto (hoyo 5), por ejemplo, es un par 3 de 150 metros cuesta arriba y el green está bien protegido por bunkers. El par 5 más largo (hoyo 11) mide 525 metros y sólo puede ser alcanzado en dos golpes por los jugadores más fuertes.